Atrás quedaron los tiempos en los que la recomendación “boca a boca” era la estrategia de ventas de mayor impacto para las marcas… La irrupción acelerada del internet vino a terminar con esta suerte de tradición, y hoy las firmas apuestan —o así debería ser— por crear una imagen de prestigio en la red.
Por un lado, se esmeran para ofrecer sitios web ágiles, dinámicos y amigables con los usuarios; por el otro, centran sus esfuerzos en contar con redes sociales de gran valor informativo que ofrezcan respuesta inmediata.
No podría ser de otra manera. Hoy más que nunca tiene que ser así, ya que antes de realizar cualquier tipo de compra cada vez son más los usuarios que recurren a la web para investigar y comparar productos, marcas y precios, a fin de tomar la decisión que más les convenga: “busco (y elijo), luego compro”.
De ahí la importancia de tener una buena posición en los resultados que arrojan los buscadores. Una vez más, las cifras nos dan la razón: 71% de los latinoamericanos consulta la web en su recorrido a las compras. Es decir, los clientes potenciales se informan antes de ir a un local. Cualquier búsqueda, por más veloz que ésta sea (los clientes tienen poco tiempo), puede detonar una gran oportunidad de venta para nosotros.
Apostar por estrategias digitales no es poca cosa; es fundamental optar por la asesoría de expertos en la materia, que nos ayuden a crear páginas web listas para ser consultadas también en dispositivos móviles, con la programación apropiada para que cualquier persona que busque información relacionada con la marca la encuentre de inmediato. Acércate a los especialistas; sin duda, la inversión vale la pena.
Tomemos en cuenta que 52% de los internautas está menos propenso a dialogar con una marca si la página web de ésta no se encuentra optimizada para dispositivos móviles.
Por último, no debemos olvidar que la experiencia nos ha enseñado que la gente difícilmente busca por marca, más bien busca por producto. ¡Aprovechemos esos micromomentos!
