Hace tiempo, estaba platicando con un amigo, el cual me dijo que estaba muy feliz debido a que el noveno mes del año había llegado. Al principio, supuse que su motivo para estar contento era igual que el mío: las mejores fechas están por venir. ¡Cuál fue mi sorpresa al enterarme que rebosaba de alegría debido al hecho de que ese año no le había sido grato, y solo le quedaban 4 meses para finalizar! No quiero que piensen que tragedias, como la muerte de un ser querido o el diagnóstico de una terrible enfermedad, eran los motivos por los que esa persona consideraba a aquel año como malo. En realidad, el haber sido rechazado por muchas chicas y haberse roto las costillas tratando de mover un enorme adorno eran las causas que le hicieron considerar a ese dos mil y tantos (no recuerdo cual fue) como pésimo. En lo que respecta a mí, le dije que estaba feliz porque las festividades (con excepción de la Pascua y mi cumpleaños), más lindas estaban por venir.
Muchos años han pasado desde aquella anécdota que recordé el día de hoy, cuando el año está por culminar, y como bien sabemos, vienen temporadas que resaltan lo mejor de nosotros mismos, pues más allá de aludir a tradiciones que son parte de nuestra cultura, se trata de fechas en las que podemos estar en familia y compartir gratos momentos. Quien no ha viajado grandes distancias para estar en Navidad con sus papás, tíos o hermanos. Conozco a muchos adultos que están más emocionados que los niños con la llegada del Halloween, y ni hablar del día de la Independencia de México, donde la noche está llena de magia y comida que nos encanta. Pero, se han detenido a recordar: ¿cómo eran estás fiestas sin las redes sociales?
Muchas personas de Tijuana ni siquiera habían nacido cuando no teníamos internet en nuestros hogares; es más, era tan limitado, que recuerdo que no había ni una página web que aludiera a las películas de terror que me gustaba ver el 31 de Octubre y días anteriores. En esa época de televisión por cable y tardes aburridas en plena temporada de fiestas decembrinas, jamás llegamos a pensar que el diseño gráfico (carrera que estaba de moda), se convertiría en una piedra angular del mundo que vendría, donde la conectividad del planeta entero estaría a un clic de distancia, y para ello necesitaba de mentes creativas que con su talento artístico sedujeran a una sociedad que, acostumbrada a leer revistas quincenales, pronto tendría a su alcance un sin fin de opciones por la red, y como era de esperarse, elegirían las que mejor contenido visual tuviesen.
El mundo cambió para bien, y experimentamos una revolución que puso absolutamente todo a nuestros pies. Dejamos de ser aquellos espectadores del Black Friday que solo se limitaban a ver con ilusión los cartelones que colgaban en los supermercados anunciando las ofertas, para ser parte activa de éste día incluyendo promociones en nuestros negocios, porque sabemos que no podemos quedarnos atrás, y es impulsivamente contagiosa la sensación de unirnos a los demás en éste frenesí de ventas y compras. ¿Verdad que te ha pasado? Es obvio que sí, y te sientes mal, frustrado y no modernizado al ver que todos los comercios a tu alrededor tienen promociones que impulsan a los compradores, mientras que tú no solo estás sin vender, también dando una imagen anticuada ante una clientela que suele basarse en modas, como lo es en México el reciente Buen Fin.
Todo esto tiene su origen en la misma naturaleza de las festividades de fin de año: al unirse las personas para compartir, requieren productos que consumirán o regalarán en ese momento, y ¡Eureka, se traduce a ventas! Incluso descaradas, como lo es el Black Friday, y más el Ciber Monday, que solo prolonga las grandes ofertas, pero limitando las compras al internet; era de esperarse, el mundo gira en torno a la web.
Las fiestas van por separado, su Marketing tan junto como los vagones de un tren.
El arte gótico (al hablar de cine, en realidad se llama Impresionismo alemán) de Tim Burton nos fascina, en especial el plasmado en “El Extraño Mundo de Jack”, película en la que un nabo llamado Jack (origen de la imagen de la calabaza de Halloween), sustituye a Santa Claus en Navidad, generando un caos. Pero pocos sabían que Burton tuvo su inspiración cuando vio en un supermercado como quitaban los productos de Halloween para sustituirlos inmediatamente con los de Navidad, ¡prácticamente borrando las fronteras del tiempo entre una festividad y la otra! Para las personas ajenas al mundo del diseño gráfico y el marketing es una locura, pero para todos aquellos que nos dedicamos a esto, es de lo más habitual, ya que al hablar de fechas específicas, el tiempo apremia para garantizar ventas, tanto en físico, pero en lo que a nosotros concierne, en páginas web y redes sociales.
Seas o no de Tijuana, ciudad fronteriza que une a dos mundos, es importante que sepas estos datos si tienes en mente que tu negocio incursione con ventas online en los últimos 4 meses del año: de acuerdo a la National Retail Federation, el gasto minorista de Halloween en los últimos años, se estimó en alrededor de 9, 000 millones de dólares. De esta facturación total, entre el 24% y 25% de las ventas (1/4 del total) se realizaron por Internet (unos 2,250 millones de dólares, Aprox.). En lo que respecta a las compras que abarcan de Noviembre a Diciembre, 204, 500 millones de dólares fueron gastados, pero aquí viene el dato más importante: antes de la Pandemia, las ventas online representaban en estas fechas el 45% (una cantidad ya bastante alta). Pero ahora, en los tiempos post COVID, se espera que el 60% de todas las ventas se efectúen vía online, y la tendencia va en aumento.
Sé que te preguntarás: ¿por qué sucede esto?, y la respuesta es muy sencilla; ante todo, va más allá de resistirnos a usar la tecnología como muestra de rebeldía ante un mundo que evoluciona (y al igual que las teorías de la evolución) para extinguir a los ejemplares menos aptos (los negocios que no se actualizan). En realidad, todo se centra en lo fácil que es escoger desde tu hogar un producto, en medio de un amplio catálogo, cargar la compra a tu tarjeta de crédito (¿quién sigue usando efectivo?), y esperar a que llegue a tu domicilio. Así de rápido, seguro y sencillo. Ahorras tiempos que puedes efectuar en otra cosa, y no en ir hasta un supermercado, buscar donde estacionarte, escoger entre muchas cosas (haciendo compras innecesarias), pagar y retirarte pensando en que tal vez, lo que necesitabas, estaba más barato en otro lugar.
¿Feliz de que viene lo mejor del año… o ponerte contento de que estás a tres meses de que acabe un pésimo año en ventas, con un futuro incierto para tu negocio?
Jamás imaginé que la charla con mi amigo, que previamente te comenté, sirviera como metáfora para definir nuestra perspectiva comercial ante los últimos meses del año, donde de nosotros depende si queremos aprovechar las mejores fechas para obtener grandes ganancias mediante la venta de productos y servicios vía online (páginas de internet y redes sociales), o si nos resignamos a esperar el final, con la incertidumbre de si seguiremos o no en el mercado. Son simples matemáticas, si no vendes, no generas. Y eso es aquí, en Tijuana, como en China, país de origen del Single Day, el cual no es otra cosa más que un pretexto para hacer crecer tus ventas ante una enorme comunidad millennial que ve en el Internet el medio más eficiente para suplir sus necesidades.
Empápate de buenas estrategias y modernízate. El diseño gráfico es fundamental para cautivar a los compradores con tendencias visuales no solo propias de la época, también llamativas, para hacerles saber que tú eres su mejor opción en la época del año con más competencia.
¡Felices Fiestas! Nos seguiremos viendo durante todo lo que resta del año, es cuando más activos estamos.
— Por Joanna Arroyo, Directora de Studio ARSA.
